En lo alto de las empinadas calles,
el castillo-fortaleza,
curado de sus heridas de guerra,
remozado, brillando el sol en sus piedras.
Sus almenas avistan mejores vientos
que los que Doña Blanca sufriera
en su torre penal,
-¡ Ah, Don Pedro el Cruel !-
Vientos con el aroma de las flores de la paz.
Salones de armas,
-ahora salones de té- armaduras,
-abolladas de gestas olvidadas- ballestas,
escudos, espadas
-sin sangre- ahí se exhiben, relucientes...
rindiendo pleitesía, evocando batallas
a los huéspedes -caballeros y damas,
montando en briosos corceles de bencina y metal-.
Pétrea fortaleza sobreviviente a los siglos,
a duras contiendas
-aún se oye el estrépito en tus piedras-.
Las mazmorras albergan licores, viandas;
las caballerizas son cocinas, comedores,
sobrias y cómodas habitaciones.
Pendes de tus muros, en la puerta de arco ojival
-cual blasón-
escudo de parador nacional.
Albergue de tus nuevos señores: los turistas,
de cercanas y lejanas tierras;
hoy tus murallas son recinto de paz.
(Del poemario "Frente quebrada")
jueves, 28 de enero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Está muy bien que hagas propaganda de tu pueblo. Merece ser visitado.
ResponderEliminarAsí lo creo. También un poco tuyo, también, ¿no?
ResponderEliminarUn beso muy fuerte, Ana
Ay, mi querido paisano con tu poema y las fotos... se me llena el alma de nostalgia. Las monjas cada año -sin excepción- nos llevaban a Sigüenza de excursión ("qué buenas son la hermanas santa ana, qué buenas son...") Después he tenido ocasión de disfrutar del parador, antiguo castillo tan bellamente evocado en tu poema, y es sencillamente magnífico.
ResponderEliminarGracias Jorge, un besazo.
Paloma,sabía que os iba a gustar a unas amiguitas que tengo: Solateras, tú, María Narro,etc. que conocéis Sigüenza.
ResponderEliminarMe alegro que te haya recordado..."que nos llevan de excursión". Nosotros, en la mili, cuando volvíamos jodidos (perdón) de maniobras les cantábamos lo mismo, ¡menuda cara ponían los jefes!
Muy poético recorrido histórico por las piedras centenarias.
ResponderEliminarBesos
Narci
Gracias, Narci; muchas gracias por tu presencia y comentario.
ResponderEliminarUn beso.
Querido Jorge:
ResponderEliminarperdona esta intrusión (tan apropiadad por otro lado son mi Sigüenza de fondo, el paisaje en el que me refugio los fines de semana) pero necesitaría una fotografía de tu hermana Elvira en jpg. ¿Me la mandas a contacto@jaimealejandre.es? Gracias, jaime
Jaime, hoy, y en este mismo momento, veo tu mensaje; supongo que no vas a ver ya mi respuesta, pero que quede aquí patente mi despiste.
ResponderEliminarUn abrazo.